Exorcismo nacional
El exorcismo , dicen en Wikipedia, es un ritual o liturgia mediante el que se pretende expulsar o destruir a un ente sobrenatural que se considera ha tomado posesión o control de un objeto físico o ser vivo.
Así pues, para practicar un exorcismo se necesita un sacerdote autorizado, un ente sobrenatural y un objeto físico o un ser vivo. Un ejemplo de ello lo tenemos por ejemplo en la conocida película de terror El exorcista y en sus terroríficas secuelas , en la que un atormentado sacerdote se enfrenta aquella niña poseída, insultadora, con vozarrón diabólico, de cabeza giratoria, que levitaba y vomitaba cosas verdes. Pero algunas personas, creen y están convencidas de que semejante situación no ocurre únicamente en las películas, si no en la realidad nuestra de cada día, y se ocupan a lo largo y ancho de este mundo a realizar exorcismos.
En España la superestrella de los exorcistas, reconocido por la Iglesia católica, es esta alegría de hombre que veis en la imagen ,arma antidiabólica en mano , y que corresponde al sacerdote José Antonio Fortea Cucurull.
Fortea , párroco de Nuestra Señora de Zulema de la diócesis de Alcalá de Henares , de físico frágil e inquietante, es capaz de echarle un pulso, siempre vencedor, al Diablo, y se ha convertido en uno de los más brillantes exorcistas del mundo, que es capaz de conjugar la teoría (tiene una tesis doctoral sobre el diablo) con la práctica del exorcismo, de descubrir a los posesos incluso por teléfono y de echar al diablo en unas cuantas sesiones.
El padre Fortea viste sotana rigurosa , aunque aclara que salvo cuando vengo a Madrid, para no llamar la atención . Considerado uno de los mejores demonólogos del momento, ha realizado ya más de una veintena de exorcismos. También atiende telefónicamente: Me llama mucha gente diariamente. Les escucho, les hago unas cuantas preguntas y detecto si se trata de una auténtica posesión. Como en la mayoría de los casos no se trata de posesos, les doy por teléfono los consejos adecuados».
Para echar demonios no vale cualquier cura. El Derecho Canónico prescribe que el ordinario del lugar concederá esta licencia solamente a un presbítero piadoso, docto, prudente y con integridad de vida. Fortea achaca la falta de colegas al cuestionamiento de algunos dogmas, en los años 70, por parte de algunos teólogos y al hecho de que en muchas diócesis, los obispos dicen que no quieren saber nada de ese tema. Por eso, España es una auténtico desierto de exorcistas, cuando hacen falta más que nunca.
Y eso que tan sólo el 30% de los propios católicos practicantes cree en el infierno y en el diablo. Dice Fortea que el demonio ha experimentado suma alegría al ver que, en los últimos años, su existencia no era creída ni por los mismos creyentes, en contra de la doctrina de los Evangelios, de San Pablo, de la Biblia, de los Santos Padres, de los Doctores de la Iglesia.
La presencia del Maligno es hoy más activa que nunca, porque la sociedad se ha paganizado y cada vez se practica más la brujería, la adivinación y el espiritismo, puerta de entrada de la posesión diabólica, advierte Fortea. A su juicio, la telequinesia, la levitación, los viajes astrales, toda adivinación de lo oculto son fenómenos provocados por la intervención oculta de los demonios. Estas prácticas son invitaciones tácitas a la posesión.
Lucifer sigue muy presente en nuestra sociedad fundamentalmente a través del culto que le profesan sus adeptos o mediante la posesión diabólica que presentan ciertas personas. Según Fortea, proliferan las sectas satánicas en nuestro país: sólo en Madrid hay unas 30, en España más de 100 y en Estados Unidos 450. No tienen muchos adeptos y mueren con la misma facilidad con la que nacen.
La zona más proclive a las sectas satánicas es el Levante español, desde Barcelona a Valencia pasando por las provincias mediterráneas costeras, como Murcia, Almería, Málaga y Granada. Algunas de estas sectas ofrecen a Satán sacrificios humanos en misas negras, sobre todo de niños de padres inmigrantes ilegales, cuyos cuerpos hacen desaparecer con ácido.
Además el Diablo reafirma su presencia en este mundo por medio de la posesión. Se trata de un fenómeno sorprendente en virtud del cual el demonio invade el cuerpo de un hombre vivo y mueve sus órganos en su nombre y a su gusto, como si se tratase de su propio cuerpo, reside realmente en su interior, habla y lo trata como propiedad suya.
Fortea está ya tan acostumbrado a tratar con posesos que los puede distinguir por signos: ponerse furioso por una oración o ante el agua bendita o el crucifijo; hablar o entender lenguas desconocidas; conocer cosas ocultas o distantes y mostrar fuerzas físicas más allá de la edad o condición. Las causas de la posesión pueden ser: el pacto con el diablo, asistir a sesiones espiritistas o a cultos satánicos, que un hijo haya sido ofrecido por su madre a Satanás, un maleficio...
El exorcismo es un combate a muerte contra el diablo en nombre de Dios, en el que Satán siempre termina derrotado. Aunque éste consiga hacer cosas prodigiosas, como girar la cabeza del poseso 360 grados o hacerle reptar por el suelo como una serpiente. Recuerdo una vez que le hice una pregunta sin mover los labios y la contestó a la perfección, dice Fortea. El exorcismo puede durar horas y horas, durante días o sólo un par de sesiones. Depende del diablo que haya que expulsar. El rito consiste en conjuros y oraciones a Dios. Los peores gritos y convulsiones se producen al inicio de la oración de conjuro. Durante el ritual, el exorcista es ayudado por cuatro o seis personas que sujetan al poseso. Éste escupe, grita y lanza terribles alaridos y risas malignas. A veces hay que atarlos. Algunos posesos muerden. Una vez liberado, el poseso queda normal, no recuerda el exorcismo para nada y suele preguntar: ¿Qué hago en el suelo?. Eso sí, siente un cansancio enorme, como si le hubieran dado una paliza.
Referencias: Crónica El Mundo Enemigo del diablo- El exorcista con más trabajo- José Manuel Vidal - http://www.fortea.ws/sermones/ demonio/sermonesdemoniacos.htm l / http://www.nodo50.org/tortuga/ article.php3?id_article=2609 / http://www.nodulo.org/ec/2005/ n043p24.htm .
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