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FRANZ

La ajetreada historia del origen del mundo

La ajetreada historia del origen del mundo

No, no se trata de un artículo guarrillo, así que algun@s de vosotr@s ya podéis dedicaros a otra cosa; se trata del famosísimo cuadro de  Gustav Coubert , pintado en 1866, titulado  “El origen del mundo”.

 

Pintado en 1866 y sin título, permaneció oculto en colecciones privadas durante 130 años. , hasta que fue expuesto por primera vez el 26 de junio de 1995 en el Musée d’Orsay, en París, donde permanece.

 

Fue Charles Leger, especialista en la obras de Courbet, quien se atrevió a darle título en 1935: L’origine du monde” (El origen del mundo). Los comisarios de una gran exposición sobre Courbet realizada en París en 1977 no se atrevieron a exponerlo, a pesar de estar disponible. Sí se incluyo, en cambio, en otra similar  realizada en Nueva York en 1988.

 

Nunca faltó un comprador que quisiera incorporar el cuadro a su colección privada. El primero fue seguramente el embajador turco en París; Khalil Bey, que, al parecer, fue quien lo encargó al propio Coubert; lo guardó durante dos años en su cuarto de baño, oculto tras una cortina verde.

 

Luego pasó a Jean Baptiste Faure, barítono de la Ópera de París, pero su mujer le pidió deshacerse de la obra. El 1888 estaba en manos de un marchante de París, en cuya trastienda, y solo a un reducido círculo de confianza, exhibía la obra.

 

Nada se sabe del cuadro durante los siguientes  años. Cuentan que pasó a la colección particular de un gobernador civil famosos por su puritanismo ( y por sus perversiones ), y más tarde a un ginecólogo que lo utilizaba como reclamo, y más tarde  a un burdel.

 

Lo cierto es que en 1912, una prestigiosa galería compró el cuadro, y se inició su carrera internacional cuando François de Hatvany, un coleccionista de Budapest, se lo llevó a su ciudad.

 

El cuadro fue robado por el ejército de ocupación nazi. Por supuesto la primera intención fue destruirlo, pero después de sopesar los pros y los contras decidieron salvarlo. El principal motivo: la obra estaba valorada en uno 300.000 dólares. Terminó en manos del ejército soviético, quien lo devolvió a su legítimo dueño.

 

En 1955, Sylvia Lacan, la protagonista de “La regla del juego”, de Renoir, pidió a su marido, un conocido psicoanalista, el cuadro de Courbet como regalo, y lo consiguió. El precio: un millón y medio de francos. El cuadro era tabú, pero estaba muy bien valorado. No pudo conservar durante mucho tiempo el regalo; ante las insistentes críticas de los vecinos y del servicio, que no podían soportar ver el cuadro colgado, tuvo que deshacerse de él.

 

En 1967, el sexólogo Zwang publica la primera foto de la obra; en 1977 es reproducida por primera vez en un libro de arte, y en 1988 se expone por primera vez en un museo: The Brooklyn Museum of Art.

 

En 1994, el libro “Adorations perpètuelles” , de Jacques Henric, fue secuestrado para impedir su distribución , por llevar una reproducción del cuadro en la portada.

 

En 1995 el cuadro pasó al Musée d’Orsay, reforzándose la seguridad a su alrededor por el temor a las reacciones del público. El ministro de Cultura francés, Douste-Blazy, realizó el discurso de ingreso de la obra en las colecciones nacionales; pero no se fotografió con él.

 

Y así hasta hoy. Os espera pues en el Musée d’Orsay

 

 

Referencia: ¿ De qué se ríe la Mona Lisa?-Mabel Figueruelo

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